Seguramente una de las primeras decisiones que realizarás con tu pareja al planificar el día de tu boda.

¿Cómo quiero que sea mi ceremonia?

Bride looking to the groom on theri wedding

La respuesta puede ser no tan obvia, ya que involucra tu creencias y tu religión.

Al final solo tú y tu pareja sabrán cómo quisieran celebrar su boda. Tómense un té, háblenlo con calma en un espacio seguro.

En todos estos años viendo a cientos de parejas, pude presenciar estas tres maneras en que puedes realizar tu boda.

Si tienes claro cuál es tu religión y la de tu pareja, no hay vueltas que darle.

Vive con intensidad este momento. Independientemente si es boda católica, cristiana, judía o de cualquier otra de las más de 4 mil religiones que existen en el mundo.

Quizás el único consejo que te puedo dar, es que en algún momento durante o justo después de la ceremonia, y solicitando la autorización del caso, puedan decirse sus votos.

Te aseguro que no se arrepentirán. Créeme, vale totalmente la pena.

Si todavía estás aquí, probablemente significa que te consideras agnóstico, ateo o simplemente no te alineas a ningún rito religioso. Sin embargo, hay algo intrínsecamente especial en las bodas y la espiritualidad. No pueden ir separados, van de la mano.

Entonces, ¿Qué hacer? Una gran opción es combinar la ceremonia Civil y una boda simbólica. Una vez terminada la firma del matrimonio civil, da inicio la parte simbólica. Ahora, pueden ser eventos separados sin ningún problema.

Si no has asistido a una boda así, quizás la mejor manera de entenderlas es contarte una historia que tuve la suerte de fotografiar.

La mejor amiga de la novia y el mejor amigo del novio, fueron los maestros de ceremonia. Entre chistes y palabras profundas crearon un ambiente relajado y lindo. Se veía que lo habían ensayado al menos un par de veces. En verdad se lucieron.

Ellos fueron los encargados de invitar a las personas más cercanas para dedicarles unas pocas palabras. Todos tenían impreso su discurso y sabían de antemano el orden en el que iban a hablar. Todos hablaron con el corazón.

Junto a la pareja, estaba un Bonzai, cada amigo o familiar que habló, agrego un vasito con tierra. Al final la pareja se dedico sus votos e intercambió sus anillos. Justo al terminar la ceremonia, regaron un poco de agua al Bonzai para finalizar con este lindo simbolismo. Sobra decir que todos lloramos un poco.

Votos

Siempre es una buena idea. Siempre. Ahora los votos se tratan más de agradecer y decir en voz alta cuáles son las cosas que admiras de tu pareja. Si te animas a escribir tus votos, recuerda hacerlo en una libreta y a mano. Hay algo distinto que imprimirlo o peor aún, leerlo en el celular.

Las ceremonias simbólicas pueden ser muy variadas.

Algunas pueden ser inspiradas en ceremonias incas, naturaleza, corrientes budistas, etc. No hay reglas.

Quizás el único denominador común de una boda simbólica es que la rebanada del pastel son los votos.

La diferencia solamente es la cantidad de invitados, y veces el contexto donde se celebrará. Tu jardín puede ser una gran opción, más aún si tienes recuerdos de tu infancia en ese lugar. Pero si piensas en bodas íntimas, el lugar puede influir mucho en tu experiencia y la de tus invitados.

Es viable realizar una boda de 30 a 50 personas en medio del bosque nublado, una hacienda a las faldas del Cotopaxi, un Hotel cool en las islas Galápagos, una hostería con vista a alguna laguna en Imbabura o en medio de la selva amazónica, por dar unos pocos ejemplos. Pero invitar a 250 personas a lugares así sería una locura en temas logísticos y francamente también ambientales.

Algo muy cool de una boda íntima es que no será de un solo día. Usualmente vienen acompañados de actividades que variaran mucho dependiendo del contexto. ¿Un tour de buceo con tus invitados? ¿Una tarde con fogata mirando las estrellas? ¿Un domingo de Spa? Es realmente posible si piensas en bodas íntimas.

Al final, no hay correctos o incorrectos. No hay manuales. Lo importante a mi forma de ver es ser auténtico contigo mismo y con tu pareja. Hacer un esfuerzo por tener una experiencia significativa y profunda.

Jamás podría decir que una es mejor que la otra. Solo son distintas.

No olvides por qué estás leyendo esto. Seguramente amás a alguien, y han decidido que hacen un gran equipo. Y eso es lo que vamos a celebrar.